Amad a vuestros enemigos

Amad a vuestros enemigos es una guía práctica para sentirse
libres de los enemigos mediante los poderosos aliados de
la sabiduría, la tolerancia y el amor. En particular, ofrecemos
herramientas para vencer a cuatro clases de enemigos con los
que nos encontramos en la vida; según las antiguas enseñanzas
tibetanas de transformación de la mente, esas cuatro clases son:
–– El enemigo exterior: las personas y las instituciones que
nos hostigan, molestan o perjudican de alguna manera, y
las situaciones que nos frustran.
El enemigo interior: la ira, el odio y otros impulsos destructivos. El enemigo secreto: la obsesión y preocupación por uno
mismo, que nos aísla de las otras personas, dejándonos
frustrados y sol
El enemigo supersecreto: el aborrecimiento de uno mismo
profundamente asentado que nos impide encontrar la
libertad interior y la felicidad verdadera.
En el libro presentamos los enemigos por este orden, avanzando
desde los enemigos exteriores hacia el interior, puesto
que el proceso de encontrar la libertad mediante la superación
de la ira, el miedo y la preocupación por uno mismo procede
más o menos en este orden. Pero la vida cambia continuamente,
es impredecible, y somos muy conscientes de que no siempre
nos encontraremos con nuestros enemigos de esta manera ordenada.
Por eso te animamos a comenzar desde el punto en el
que te encuentres. Tal vez eres tan duro contigo mismo que ni
siquiera puedas empezar a enfrentarte a tus enemigos porque la
empresa te parece desesperada. Podrías empezar primero por el
Apéndice y practicar la meditación de la amabilidad amorosa
para desarrollar la autocompasión antes de embarcarte en ello.
O podrías saltar hacia delante y leer el capítulo 4 sobre el enemigo
supersecreto para sentir la alegría ilimitada y la libertad
interior que está delante de ti. Tal vez lo que está provocando tu
angustia en este momento es la ira que habitualmente abrigas;
podrías empezar entonces por el capítulo 2, sobre la forma de
vencer al enemigo interior.
Independientemente de cuáles sean los enemigos a los que
nos enfrentamos, el método para vencerlos es el mismo. Primero,
usando la sabiduría crítica, identificamos con claridad
al enemigo –no es tan sencillo como parece– y luego nos entregamos
a la atención plena para experimentar de lleno cómo
funciona. Después nos disponemos a desmontar nuestra relación
de enfrentamiento con el enemigo aprendiendo a tolerarlo
y desarrollando compasión por él, aunque emprendamos una
acción decisiva para desarraigarlo. Por último, liberados de
nuestros enemigos, podemos relajarnos en la dicha de la felicidad
verdadera y la alegría de vivir de manera armónica con
los demás. Trabajar con nuestros enemigos es un proceso a la
vez interno y externo.
No es fácil liberarse a sí mismo. Requiere inteligencia, valor
y constancia para separarse de las maneras habituales de mirar
el mundo y responder de una forma diferente y más productiva.
En cierto nivel, hacer frente de manera eficaz a nuestros
enemigos exige control: no arremeter con rabia o con represalias,
ni satisfacer un deseo de venganza. En otro nivel, supone
implicarse activamente con el mundo para que, en vez de expresar
la ira y el miedo de manera destructiva, emprendamos
una acción constructiva desde un lugar de amabilidad hacia los
otros y hacia nosotros mismos.
Finalmente llegamos a comprender que no existe ningún
«nosotros» y «ellos», ninguna separación entre uno mismo y el
otro, y, por lo tanto, ningún enemigo. La victoria sobre nuestros
enemigos es la comprensión profunda de nuestra interdependencia.
Durante años, hemos impartido un taller de fin de semana
sobre la manera de resolver la situación con los enemigos. Este
texto es el resultado de ese taller. Lo hemos concebido como
un libro de ejercicios que te ayude a identificar a tus enemigos
y a transformar tu relación con ellos.
En el contexto espiritual, «amor» significa desear la felicidad
de alguien, y esto es lo que te animamos a hacer respecto
de tus enemigos. El mandamiento de amar a todo el mundo,
incluidos aquellos que te hacen daño –tal como han propuesto
muchos grandes maestros espirituales, como el Buda y Jesús–,
ha sido considerado a menudo indeseable o incluso imposible.
Sin embargo, vale la pena considerar que es, en realidad, eminentemente
posible y práctico desear una felicidad auténtica
al enemigo, pues esta es la única manera de quedar libre del
tormento que nos ocasionan. El beneficio de este amor es doble.
Si aporta felicidad a un enemigo, es mucho menos probable que
ese enemigo provoque daño o frustración en quienes le rodean.
En todo caso, si este punto de vista del amor no tiene un efecto
inmediato sobre tu enemigo, el mero acto de amar lleva consigo
la paz interior para el que ama.
En este libro, recurrimos a muchas tradiciones espirituales,
así como a la psicología moderna, a fin de ofrecer herramientas
que sean útiles para ayudar a cualquier persona de cualquier
creencia –o a los escépticos– en ese intento de cambiar la relación
con los enemigos y aprender a vivir una vida guiada por
la sabiduría, la tolerancia, la compasión y el amor. Esperamos
que encuentres en estas enseñanzas y en estos ejercicios algo
con lo que puedas experimentar. Contémplalo como un gran
experimento en el que verte a ti mismo de manera diferente,
ver a los otros de manera diferente, y llegar a una interpretación
diferente de la fuerza verdadera y la verdadera felicidad.
Antes de que Bob se convirtiera en profesor universitario
y escritor, vivió en la India y fue el primer occidental en ser
ordenado monje budista tibetano. Sharon estudió meditación
en la India y Birmania con maestros de la tradición Theravada,
y luego regresó a Estados Unidos para cofundar un centro de
retiro budista en la ciudad de Massachusetts.
Cuando enseñamos juntos, alternamos enseñanzas y relatos,
ejercicios y meditaciones, y así lo hacemos también en estas
páginas.
Las historias, enseñanzas y ejemplos de Sharon, extraídos
de la experiencia de su propia vida y de la de sus discípulos,
aparecerán con esta tipografía.
Las enseñanzas de Bob, pertenecientes al canon budista y a
sus experiencias personales, aparecerán con esta otra tipografía.
Sharon Salzberg
Tenzin Robert Thurman
Nueva York, 2013